La final de la Copa Libertadores 2018 entre River y Boca se juega sí o sí. Tal como ha anunciado oficialmente la Conmebol, la reunión que se lleva a cabo este martes en Luque servirá solo para definir la fecha, hora y sede del partido definitorio. La posibilidad de que los boquenses ganen el título en mesa, está descartada para el ente del fútbol sudamericano.
"La reunión tiene como objetivo la definición de la fecha y el lugar en el que se disputará el partido el partido final de vuelta de la CONMEBOL Libertadores 2018, originalmente programado para el pasado 24 de noviembre de 2018 y prorrogado de mutuo acuerdo por las tres partes", informó el organizador.
De esta forma, Conmebol echa por tierra el pedido de Boca Juniors, que a través de una carta formal, pidió la descalificación de River Plate por ser responsable de los hecho ocurridos el pasado sábado en el Monumental.
Este martes la cadena TyC Sports, que se basa en fuentes de Conmebol, apunta que el máximo ente del fútbol sudamericano quiere que el segundo choque entre River y Boca se juegue fuera de Argentina. A pedido de ellos debería ser en Paraguay.
Según la información, el Estadio Defensores del Chaco de la capital paraguaya y la Nueva Olla (recinto del Cerro Porteño) parten como los dos grandes favoritos para el cotejo entre dos de los exponentes vanguardia del fútbol sudamericano.